Productividad

La Única Cosa en la que te Tienes que Centrar para Alcanzar Tus Objetivos en tu Camino Hacia la Realización Personal

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De acuerdo. ¡Vamos a por ello!

Ese es siempre el punto inicial cuando decides ir a por algo en la vida. Oíste algo. Pensaste en algo. Te gustó. ¡Decides ir a por ello! Esto lo he hecho para tantas cosas en mi vida, que solo voy a listar algunas de ellas para darte una idea:

  • Comenzar una nueva dieta.
  • Comenzar a practicar ejercicio.
  • Comenzar un hábito de lectura diario.
  • Comenzar a meditar.
  • Comenzar a practicar yoga.
  • Comenzar un nuevo negocio.

La lista puede continuar sin parar porque es una lista infinita.

Nunca te olvides de la REGLA NÚMERO 1: “La vida nunca se acaba hasta que te mueres”.

Antes de decir la frase que mencioné al principio de este artículo (era “¡Vamos a por ello!”, por si acaso la olvidaste), debes estar seguro de que has seguido estos pasos previos:

  • Estás convencido. Realmente necesitas hacer eso para llenar tu vida.
  • Te sientes motivado. “Esa cosa” te atrae.
  • Lo has calendarizado. Qué días, cuántas veces, cuanto tiempo cada día…

Tras esto, necesitas medir y controlar si estás haciendo lo que se supone que debes hacer. Por eso yo soy un gran creyente de las apps que sirven para controlar hábitos. Estas apps te aportan 2 funcionalidades muy importantes:

  • Motivación. No hay nada más motivador que marcar una tarea como completada. Ese es el inolvidable momento en el que dices: “Lo hice”. ¡Y eso te hace sentir bien!
  • Datos. Ellas no te van a mentir. Vas a ver lo que hiciste y lo que no. Sin prejuicios.

Este es el aspecto en el que la mayoría de nosotros hacemos “lo que es incorrecto”. Tan pronto como medimos algo, nos centramos en los números y empezamos a mirarlos cada día. Sin excepción. Como si fuese una obsesión. Eso nos somete a presión porque la vida es, normalmente, una montaña rusa. La vida no es más que continuas subidas y bajadas. Es imposible tomar un camino tranquilo, en el que nada nos afecte o afecte a nuestras tareas.

El mundo es complejo y está lleno de variables que afectan a nuestros procesos, a nuestra vida.

Si hacemos un seguimiento diario de nuestros datos, sufriremos escenarios de “subidón”, en el momento en el que veamos un buen dato, y escenarios de “bajón”, cuando sea que nos visite el dato negativo. Esos “subidones” y “bajones” diarios nos harán perder el foco en nuestro objetivo. ¿Cómo podemos superar esto?

Centrándonos en LAS TENDENCIAS. Punto.

LAS TENDENCIAS tienen todos estos aspectos positivos:

  • No caemos en el análisis cortoplacista. Si apuestas por objetivos serios en tu vida, no los puedes alcanzar en cuestión de días, ¡ni siquiera en meses! Por eso tenemos que colocar puntos de control en el medio/largo plazo. A mi me gusta hacer puntos de control temporales cada mes, y análisis más profundos cada tres meses.
  • Ellas realmente nos motivan. Porque vamos a ver los “subidones” y “bajones”, pero nuestros ojos se irán hacia la tendencia. Y, si estás haciendo las cosas correctas cuando debes, seguro que siempre será ascendente. Nunca falla.
  • Ignoramos los datos diarios. Nos centramos en el proceso, en la tarea que estamos haciendo. Los grandes conseguidores de objetivos se centran en los procesos, no en los objetivos. Si el proceso es el correcto (¡asegúrate de eso!), el objetivo se alcanzará. Es cuestión de tiempo.

Las tendencias son el keroseno que nuestro cohete necesita. Esta es una de las principales reglas de productividad que he aprendido en la vida para progresar en mi camino hacia la realización personal, y por eso amo la productividad.

Foto en parte superior cortesía de rawpixel.com.